Procedimiento con fines de rehabilitación, buscando eliminar líquidos y toxinas que pueden acumularse y endurecer la zona del cuerpo donde se realizó el procedimiento quirúrgico dando lugar a una fibrosis postquirúrgica.
Mejora la circulación, disminuyen el edema y trabaja sobre la textura de la piel para una mejor cicatrización, recuperación postquirúrgica más rápida y por lo tanto menos molesta.
Consta de drenaje linfático y ultrasonido terapéutico.
El tratamiento se realiza a base de dos movimientos fundamentales; el primero de ellos es el vaciamiento, que tiene como objetivo sacar la linfa de zonas enfermas hacia colectores sanos; mientras que el segundo es el de reabsorción, que ayuda a meter la linfa en los vasos linfáticos.
Tiempo Sugerido: 5-10 sesiones post cirugía